Esta historia ha sido actualizada con una declaración de ICE.
Una madre y sus tres hijos fueron deportados de la zona de Austin el martes, informó el abogado de la familia.
Daniel Hatoum, abogado del Proyecto de Derechos Civiles de Texas, dijo que Denisse Parra Vargas es de México e indocumentada. Tiene tres hijos de 8, 5 y 4 años, dos de ellos son ciudadanos estadounidenses.
Hatoum conoció el caso a través de los defensores de Grassroots Leadership. La organización sin fines de lucro se involucró después de que Parra Vargas fuera detenida el jueves en el norte de Austin por conducir con las placas de su auto vencidas.
Parra Vargas y su pareja fueron detenidos por agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés). Hatoum dijo que Parra Vargas fue liberada más tarde ese mismo día con un grillete electrónico en el tobillo; su pareja permaneció bajo custodia de ICE.
A Parra Vargas le dijeron que se presentara el martes en un centro de procesamiento de Pflugerville. Su abogado y los defensores de Grassroots Leadership dijeron que ella pensaba que iba a un control rutinario.
"Parece que la convencieron de que iba también en beneficio de su pareja", dijo Hatoum. "Así que fue con sus tres hijos e ICE decidió detenerlos a todos".
Tras unas 24 horas de búsqueda de la familia, los defensores de Grassroots Leadership dijeron que los localizaron el miércoles en México.
"Esto es increíblemente traumatizante para los niños, y nuestra comunidad merece respuestas", dijo Annette Price, directora ejecutiva de Grassroots Leadership, en un comunicado de prensa. "Esta familia merece dignidad, el debido proceso y permanecer en Austin, donde pertenecen".
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) emitió un comunicado el jueves diciendo que Parra Vargas optó por llevar a sus hijos con ella a México.
"La narrativa de que el DHS está deportando a niños estadounidenses es falsa", dijo la subsecretaria del DHS, Tricia McLaughlin, en el comunicado. "En lugar de separar a sus familias, ICE preguntó a las madres si querían ser deportadas con sus hijos o si querían que ICE colocara a los niños con alguien seguro que el padre (o madre) designara".
Los abogados de la familia dijeron, sin embargo, que ICE no permitió que Parra Vargas se comunicara con parientes que estuvieran cerca y que estuvieran dispuestos a quedarse con los niños en Estados Unidos.
Corrección: Una versión anterior de este artículo decía que el hijo mayor tenía 9 años. Los niños tienen 8, 5 y 4 años.